La Herramienta...

Luego de conceptualizar a la Ingeniería de la Eficiencia, llega el momento de llevar las palabras hasta el plano de la Acción, y para ello se hace necesario conocer la herramienta que vamos a utilizar para trabajar...  

 

Si adivinó... el Cerebro. 

 

Tal como le expliqué antes, llevamos sobre los hombros la más perfecta computadora bioquímica que se conoce. Su hardware neuronal posee la capacidad de manejar y procesar millones de datos, provenientes de los múltiples sensores desplegados por todo nuestro cuerpo. El complejo y sofisticado software que sustenta su autónoma operación, se alimenta de la asociación y comparación de los datos recopilados, con lo cual devuelve resultados en tiempo real, que se convierten en nueva información o en actividades que debe realizar nuestro cuerpo, desplegando una eficiencia imposible de igualar con cientos (y quizás miles) de las computadoras más sofisticadas y los servomecanismos más modernos, tal que pretender describir TODOS los "Patrones Cerebrales" conocidos a través de este blog, sería además de una utopía ególatra de mi parte, una tarea ineficiente e inútil.

Finalmente, como en todo proceso existente, nuestro Pensamiento y/o Razonamiento se basa en la correlación Lógica de un conjunto de pasos, orientados hacia un Objetivo. Los cuales se ejecutan, alimentan y modifican, gracias a la recolección de múltiples datos Sensoriales, Percibidos y/o Producidos por nuestro cuerpo. Tal que la Ejecución Lógica-Sensorial, nos brinda la posibilidad de percibir nuestra situación actual con respecto a un Contexto, y al mismo tiempo es posible establecer el conjunto de Sensaciones que se desean percibir al alcanzar el Objetivo planteado.

La capacidad de Comparar las Sensaciones que se encuentran Asociadas sobre un Contexto particular, con el propósito de ejecutar un conjunto de pasos Lógicos destinados a modificar dichas Sensaciones de forma Consciente o Inconsciente, para satisfacer nuestros Intereses y Necesidades, es lo que para la Ingeniería de la Eficiencia denominaremos Ciclo Básico de Operación Cerebral, y será el punto de partida para establecer los lineamientos fundamentales del Método que he de proponer, como base para la generación de Ideas, orientadas hacia el pensamiento Eficiente. 

Hoy en día, aún con los avances tecnológicos existentes, es imposible entender la totalidad de las capacidades cerebrales y sus implicaciones futuras en la evolución humana. No obstante, gracias a la observación y estudio, realizado durante años por miles de profesionales diversos, en ramas que van desde la Genética hasta la Sociología, han logrado identificar algunas de las características más elementales en su funcionamiento, y entre las más destacadas, se encuentra la dualidad de los datos y procesos que componen el  Pensamiento y Razonamiento. Por consiguiente existen al menos dos puntos de vista, casi siempre opuestos en los datos recopilados desde sus múltiples sensores, los cuales permiten el análisis a través de la comparación, sin embargo, estos puntos de vista deben estar relacionados de alguna manera para brindar la pertinencia y lógica necesaria dentro de un Contexto particular.  Por lo anterior, es posible decir que el Pensamiento y/o el Razonamiento, es consecuencia de un proceso del Análisis Asociativo-Comparativo que realizamos permanentemente, el cual se da en medio de nuestra vida diaria, de forma Voluntaria o Involuntaria. 

La capacidad de realizar tareas de forma Voluntaria e Involuntaria, es intrínseca a nuestra evolución como seres vivos. Cuando se realizan tareas voluntarias, el Cerebro coloca toda su Atención en los pasos a realizar para cumplir con un objetivo, al mismo tiempo, aprende estas "secuencias de ejecución" con el propósito de convertirlas en parte integral del proceso total de Pensamiento, y poderlas manejar de forma Involuntaria o Desatendida. Respetando entonces la teoría de las Cuatro Etapas del Aprendizaje descritas con claridad por la Inteligencia Emocional, es posible inferir que cada uno de los procesos mentales Inconscientes tienen su origen en al menos un proceso mental Consciente. Tal que durante nuestra gestación, Aprendimos de forma Voluntaria y Consciente, todo lo necesario para hacer latir nuestro corazón. Al nacer, esta nueva Habilidad cardíaca ya forma parte de los procesos ejecutados de manera Inconsciente y aparentemente "fuera de nuestro control", sin embargo, se conocen casos de personas que logran ejercer un control Voluntario de sus latidos cardíacos, variando su intensidad y ritmo. En consecuencia, es posible decir que la Actividad Consciente e Inconsciente durante la ejecución de los procesos de Pensamiento y/o Razonamiento, nos lleva a la acción y reacción, frente a los datos recopilados (percibidos) por todos nuestros sentidos.